Estados Unidos sufrió su primera epidemia importante de drogas hace más de 150 años con los veteranos de la Guerra Civil que regresaban adictos a la morfina. A finales del siglo XIX, Estados Unidos fue expuesto al uso del y la adicción al opio que provino de su recién adquirido territorio, Filipinas, en 1898 y de la creciente inmigración china a los Estados Unidos.